Por Marta Mestre y Patricia Soria, profesoras de Lengua y Literatura española en PAI y Diploma.
Siempre ofrecemos la solidaridad fuera de nuestro círculo porque creemos que no podemos ayudar a nadie de nuestro alrededor, pero realmente estamos muy equivocados. El proyecto “Padrinos de lectura” rompe con todos nuestros esquemas: los alumnos de Year 9 usan todas sus destrezas para ayudar y fomentar la lectura de sus compañeros de Year 2.
Para mantenernos informados y llegar a ser personas indagadoras y con pensamiento crítico, uno de los pilares básicos es desarrollar la comprensión lectora. Esta la empezamos a adquirir de manera paulatina en el colegio con nuestros profesores a una edad temprana, pero también es fomentada desde casa por nuestros padres cada vez que nos animan a leer o incluso leen con nosotros.
De todas las actividades que realizan nuestros pequeños, la lectura es considerada un pilar fundamental y por ello, nuestra escuela la enfoca como una actividad divertida e interesante. Sin embargo, la lectura es una actividad que con el tiempo los niños pueden llegar a considerar una obligación y no debemos permitir que los niños consideren una obligación lo que debería ser una pasión o una fuente de inspiración. ¿Debemos darnos por vencidos y dejar que no disfruten de algo tan bonito como son las letras? Los alumnos de Year 9 no se rinden, sino que cogen como reto en este curso escolar acompañar a sus compañeros más pequeños en uno de sus nuevos aprendizajes: aprender a leer y conseguir que la lectura sea un placer y no una obligación.

Cada dos semanas, los alumnos más mayores y más pequeños se reúnen para disfrutar de un maravilloso tiempo de lectura. Previamente, los alumnos más veteranos se encargan de preparar la lectura adaptada al nivel del más pequeño. Así los de Year 9 entienden que es importante adaptarse, entender y respetar las diferencias y dificultades que puedan existir o existen entre las personas de un mismo grupo.
Cuando se reúnen, los mayores se encargan de acompañar a los más pequeños en la lectura escuchándoles y ayudándoles a pronunciar y a entonar las páginas leídas. Pero no solo eso, sino que cuidan y animan a los más pequeños en las pausas que realizan, y comprueban que su compañero está entendiendo y comprendiendo correctamente la lectura con una serie de preguntas preparadas previamente. Finalmente, los más mayores premian a los más pequeños por el esfuerzo y dedicación en esa sesión de lectura. Los más chiquitines reciben esos elogios que les llenan de orgullo y satisfacción para seguir aprendiendo y mejorando en su proceso de aprendizaje.
“Los padrinos de lectura” es un proyecto pensado expresa y únicamente para nuestros alumnos de IB, ya que, por un lado, este fomenta la buena comunicación de los alumnos más mayores al tener que explicar las instrucciones a los más pequeños y también, se fomenta en los alumnos de Year 2 el placer, ya que estos empiezan a adquirir las primeras pinceladas de buenos comunicadores al adentrarse en el bonito mundo de la lectura. Seguidamente, impulsa la mentalidad abierta para entender y comprender las diferencias que existen entre el alumnado. Esto, en un futuro, les ayudará a los más mayores a tolerar e integrar las diferencias que hay y siempre habrán en la humanidad. Por otro lado, promueve la solidaridad de nuestros alumnos, ya que actúan con respeto y los más veteranos empatizan con los más pequeños y los ayudan con cariño y ternura. De hecho, los alumnos de Y2 reciben estas sesiones con especial ilusión, por tratarse de unos momentos en los que gozan de una atención especial y exclusiva por parte de un alumno mayor. Las profesoras valoran extraordinariamente el esfuerzo que hacen los alumnos de Y9 porque permite que muchos de sus compañeros más jóvenes pierdan el miedo a la lectura en voz alta, se sientan más seguros en esta actividad y aprendan a interpretar de una forma más profunda los textos que leen.
En definitiva, el alumnado de Year 9 acompaña de la mano a sus compañeros de Year 2 para que estos se adentren en la lectura como un placer más de la vida y rompan con sus miedos de leer en público.